miércoles, 11 de julio de 2012

La opresión de la lluvia






No me he puesto el hipil
la humedad de la lluvia entra por los huecos de la hamaca
mientras parpadea tu rostro a contraluz

La lluvia habita por el patio
salpica el barandal del pozo
donde cercenamos a la luna

Sobre mí siempre te hallas
hurgando en la bombilla de mis ojos
goteando bajo la opresión de la lluvia

Aún deambulo entre larga tropa de recuerdos
con los hombros desnudos expuestos a lacias tardes en el patio
¡Ah nuestro patio!
Cubierto por famélicas flores sometidas a la lluvia
en está tierra fértil a semillas
donde los sapos buscan refugio sobre los estanques del agua


El perro atisba el rabo al sonido de tu voz
persigue fantasmas que se burlan de su olfato
corre con el ladrido que se hace eco en la certeza del silencio


Estás aquí No te has ido
Eres el escarlata que se incendia a las seis
la migaja de pan sobre la mesa
la jícara a la espera de tu sed
los hilos de la hamaca donde se enreda mi cuerpo


Eres lo que escribo -Sin saber lo que escribo-


Mis pechos tienen el desamparo de la madrugada
Colgados al tendedero como braga que oscila al viento
evaporando su aroma a sexo

Asumo mi condición de claustro
Se oxida el tiempo en la ventana
le pongo aldabas a la puerta

las horas me devoran por la opresión de la lluvia



Marina Centeno
Yucatán México