Día 1._
La poesía contemporánea puede parecer -de hecho no lo es- caótica. El poeta contemporáneo sabe, sin embargo, que no puede ser aquel Dios que -no sin humildad y orgullo- buscaba Mallarmé y acaso buscaba también Flaubert que decía "je n´écris que des phrases parfailes".
Es un hecho, la carga subjetiva es más poderosa en la poesía contemporánea que en la poesía clásica. Pero subjetividad no es -puede no ser- signo de aislamiento. La subjetividad es relación y es contacto. Lo digo con Kierkegaard: "Hay que ser objetivo consigo mismo y subjetivo con los demás".
Y si la subjetividad es profunda, el poema contemporáneo permite un conocimiento cada vez más hondo y tambien más matizado de los demás hombres, del mundo, de la "otredad".
Ramón Xirau -Poesía y conocimiento.