Ella decidió morir el mes de junio
cuando las tardes cubren de presagio
los sitios donde deambula la tristeza
y el horizonte se amalgama con el llanto
me dijo adiós sin nada al despedirse
más que el silencio de los moribundos
cuando sobran palabras y falta el ánimo
para arrimarse entre la muchedumbre
y aferrarse a lo torpe y a lo huraño
sin embargo en el fondo de sus ojos
pude ver la distancia y el abismo
que separa lo suyo con lo mío
para hacernos superfluos y distintos
Marina Centeno
DE A-TEMPORAL