II
Ya la milpa se cuece bajo el sol
y se parte el abecedario en la lengua en chaac mool
cubriendo de matices a los campos
la luciérnaga juega a ser luna menguada
Ya el oráculo cubre la madrugada con su manto azulado
se pizarra el movimiento del insecto en el desorden de las alas
Ya la langosta se alborota en sahumerio
que eleva la arrogancia en los azules cielos del mayab
con sus nubes que cubren la naranja
de un marzo que hierve hasta abril
Ya mi nombre de mestiza se sonroja entre las ramas
desborda el amarillo en el maíz cuando la larva muere
al evocar el signo del alux en el ritual de los mayas
Marina Centeno
Yucatán México