Imagen: marinacenteno
La gente se atiborra de tristeza
y llena la canasta con sus miedos
en cambio los jardines de mi casa
sólo tienen lugar para mis muertos
que corren entre pétalos y risas
y mueven a las rosas con dulzura
por eso no me importa el bullicio
ni la dádiva absurda de la vida
Marina Centeno