sábado, 13 de febrero de 2010

terapia intensiva






Día 13._




La mejor poesía es, para mí, la que es capaz de nombrar directamente lo que el poeta ve: mar, pino, Soria, aire... La imagen, directa, puede proceder a distintos niveles; que ser la descripción de un paisaje -y también de un alma- como en Campos de Castilla de Machado; puede ser la descripción de algo trascendente y visto como las visualizaciones místicas de San Juan de la Cruz. En todo caso, la imagen remite directamente a su objeto; pero remite a él con un temblor rítmico, con una alusión emotiva que tampoco es la del lenguaje común. También la imagen nos deja -aun cuando también nos diga- en el universo de lo dicho- sugerido; es ella y es más de lo que ella misma es.




Así, el lenguaje del poeta es un decir que no siempre dice pero que siempre -¿qué otra palabra emplear?- sugiere. Más técnicamente: es un lenguaje ante todo connotativo y no tanto denotativo aun cuando a veces -como en el caso de las descripciones imaginativas- parezca denotar.




Ramón Xirau