A veces siento que se oprimen los pájaros en mi cabeza -dijo
Ella salta el alambre y se cuelga del nido con los hijos abiertos Trae al viento los nombres de los machos que oprimieron la noche por el árbol Ella es pájaro y madre con sus tragos amargos El otoño le cae en la luciérnaga y de vez en cuando deja escapar por la puerta la rareza sobria de la soledad
Marina Centeno
Yucatán México