Algo se va
para cambiar el rumbo de los nombres
el índice que amortaja la historia en lo imperfecto
Algo se queda
con la rigidez que esculpe espacios en el dogma
antes de libertarse al tiempo
El amor –nuestro amor- es un designio
que traza su terreno sobre nada
se detiene
prosigue
se desata
Nos devolvemos uno al otro
porque bastan los ojos para besar al mundo
cuando la voz no alcanza su palabra
Entre página y página existe un punto de encuentro
que envuelve de silencio a los renglones
Marina Centeno
Yucatán México